Este jueves, relato. Con el Alias de otro.


La Pillina.

-¿Nombre?
-Milagros, pero todos me llaman “La Pillina”
-Señorita, déjese de chuflas o la empapelo.
-Milagros Gómez, para servir a Dios y a Usted.
-¿Profesión?
-Mis labores.
-¿Sus labores, con quién cree que está hablando?
-Bueno… Puta, pero yo no quería.
-A ver, y dice usted que el finado se le desplomó encima en pleno “acto”
-Sí, verá Sr. Policía, estábamos haciéndolo cuando de pronto se puso rojo y quedó quieto, como sin respirar.
-¿Le dio algo de beber?
-Lo mismo que a todos, una copita de anís “Los Molinos
-Señorita… ¿cómo ha dicho que se llama?
-Milagros, Sr. Policía, Milagros Gómez.
-Señorita Milagros, ¿sabía Ud. con quién estaba haciéndolo?
-No, le juro que no, al cuarto entró de paisano, aunque me extrañó que me preguntará si tenía un rosario, y me hiciera zapatear desnuda con el en la cintura.
-Un rosario dice… ¿de dónde lo sacó?
-Ay... Sr. policía, no sabe Ud. la de cosas que guardamos en nuestra caja de pandora.

-¡Joder! A ver cómo le digo yo ahora al ministro que el Obispo la ha “palmao” pegando un polvo con “La Pillina”



Comentarios

  1. Vaya maña la tuya de convertir esas palabras en una pieza de teatro con sorpresa final. Y menudo despertar que me has dado riéndome nada más abrir los ojos.
    Un abrazo.

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  2. En plan relato "negro" con gran soltura, salero e ironía, has atado las palabrejas, me simpatiza la Milagros y me apiado de ella y de los gajes que conlleva de su oficio, !con el clero hemos topado! ¿y lo que nos hemos reído? No se preocupe el policía, que mire en los archivos, no será el primer caso con "rosario o escapulario" de por medio, ni mucho menos.
    Aplauso Alfredo.

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  3. PUES MUY BIEN ATADO Y REMATADO. UNO MENOS!!!

    Un abrazo, compañero.

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  4. Palabras aliñadas a lo novela negra y un diálogo muy bien llevado.

    Un saludo

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  5. Me hace especialmente gracia porque ayer comentábamos la historia de un respetado señor de la comarca al que repatriaron de Cuba, pensamos que se estaba tomando una copita de anís Los Molinos ...
    Divertida historia, a ver como se lo cuentan al Sr. Ministro y peor, a la beata de su esposa.
    Abrazos.

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  6. Vayaaaaa bree para el comisario!!! jajajajja pero que si se pasara revista por los burdeles nos quedariamos boquiabiertos al descubrir a la clientela!

    Bss.

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  7. Buen relato, aunque no me gusta que se meta a la Iglesia en estas cosas, pero bueno, al fin y al cabo es literatura, pero yo no escribiría algo si, vaya. El diálago muy bien llevado, eso si, y me imagino a la Pillina hablando con el policía. Un beso.

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  8. Muy bien montado tu relato, con ese toque de humor que le has dado que lo hace divertido
    Un abrazo

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  9. Me gusta y me ha echo reír. Un diálogo rápido y ameno que finaliza con la sorpresa del "obispo". Saludos

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  10. Me gusta "La Pillina" con esa frescura que da el no conocer las normas para vivir con más soltura en su difícil vida...
    Te cuento su historia? creo que no hace falta... y, ¿para qué? creo que es más divertido crear una nueva y que sea mágica y propia... como un traje hecho a medida.
    Gracias por la sonrisa que me has arrancado, me la llevo para terminar el día.
    Un beso

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  11. Me ha encantado como la historia se desarrolla a través de un diálogo, pleno de desenfado y con la soltura pertinente del personaje. Digamos que en todos lados se cuecen habas, y obviamente, nada ni nadie está exento... por qué habría de estarlo el obispo?, somos humanos, y creo que esa ya es suficiente justificación como para poder expresarla al Sr. ministro. Muy bien llevado y con las palabras calzando a la perfección!
    Besos:
    Gaby*

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  12. Muy bueno!! Qué final inesperado, sobre todo para el obispo...
    El dialogo entre La Pillina y el policía tiene su cuota de humor. Habrá que ver como se las ingenia para que tal realidad no salga a la luz (pocas veces esas cosas se cuentan).
    Un beso!! Jime

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  13. Me encantó, que diálogo tan bien llevado. Pobre policía en menudo follón se metió sin quererlo, ahora le toca dar la noticia a él. Enhorabuena. Besote

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  14. ¡Pero que diálogo tan bien desmigado, qué barbaridad! ¡Y encima con un final con sorpresa!

    Así que el pillín hizo zapatear desnuda a La Pillina con un rosario en la cintura... Qué manía tienene algunos de llevarse el trabajo a casa...

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  15. Que no solo de pan vive el clero, ya veo, un postre amargo llamado Pillina.
    Que bueno, que bueno, que bueno.
    Un beso

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  16. Grancioso relato. Jugoso diàlogo, divertido y desenfadado que se disfruta desde la L hasta la ùltima comilla.

    Un fuerte abrazo, yayo (tocayo)

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  17. Qué imaginación por Dios! Qué manera de encajar las palabras en un diálogo tan divertido ja ja y la imagen de la puta (con perdón) bailando el zapateado con el rosario en la cintura...genial!

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  18. Un diálogo de lo más divertido, esto da para un acto en el teatro, me he reido imaginando a la pillina, con el señor guardia, y a este le he visto rascandose la coronilla.
    Muy bueno Alfredo.
    Un abrazo.

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  19. Jajajaj Qué buen relato para una tarde de domingo lluviosa. Parece que el lunes, que ya está al acecho grrrr, vaya a ser un poco más digerible y todo.
    Un abrazo!

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  20. jajajaja... un dialogo fenomenal! una historia imposible de explicar jejeje... un saludo!

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