Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como Marti i Pol

...Este, que os quiere:

Imagen
la plaza deldiamante os deseaunfeliz año nosolamenteestosdiasdisfrazados deunasensibleraconsumista e interesada navidad sinotodosy cada uno delospróximos trescientossesentay cinco dias queseamoscapacesdefotocopiarestaalegría yestos deseos debienestaryponerlacomofondodepantalla denuestromóvilcelularportátilmp3mp4olo que sea porquelapobrezalosabusos la delincuenciaelmaltrato el terrorismo elengañolainfidelidad sonel turrón yelpavodecadadía paraquecadamañana al engancharnosala vida nosmiremos en elplasmaynosrepitamosloquenosdijoel nen depoblesec hoypuedeserunbuen día planteemonoslo así yasí conla caralimpia salgamos a lacallejuntos zen lola lola jose tesa iban ivan titus jordi cirux tosca maac ampa isabel leticia teresa regina alfredo casandra brillibrilli mariajose laverbena barbebleu mariateresa vteyrosamari ...y para que este árbol permanezca siempre, le crecen como raices estas palabras de mi querido y recordado Martí i Pol: "De nada valen quejas ni añoranzas, ni la melancolia

El ángel de Roda de Ter

Imagen
Miquel Martí i Pol, murió en Vic el 11 de Noviembre de 2.003. Su legado poético, denso, trascendente y popular nos quedó para nuestro enriquecimiento personal y colectivo. Gran amigo y colaborador incondicional de Lluis Llach, le proporcionó material para musicar 23 canciones, 23 tesoros de los que dejamos este magnifico botón La voz sobria, reflexiva y redonda de Josep Mª Flotats inicia las primeras notas leídas de este poema que es un canto a la esperanza y una reafirmación de lo auténtic o sobre las mediocridades displicentes, que disfrazadas de lastimosos convencionalismos nos acompañan con demasiada frecuencia. Ahora mismo enhebro esta aguja,  con hilo de un propósito que callo y empiezo a remendar. De los prodigios que insignes taumaturgos anunciaron ninguno se ha cumplido,  y pasa el tiempo. De nada a poco, cara al viento siempre,  que camino de angustia y de silencios.  Mejor saber que estamos donde estamos,  fijar los pies en tierra  y proclamarnos herede