Este jueves, relato. "No te vayas a quedar de piña..."
-¡Que te he dicho mil veces que aunque la piña se vista de seda, piña se queda! -¿Tú crees, no pasaría por una piña real? -¿Real, dices…? Como mucho una piña colada con cola de pavo tonto. -No me digas eso, que me despiñono, ahora que estoy en edad de merecer… -¿Merecer…? Sí, solo te falta un cartel que diga “Piña vieja busca Piño en buen estado” -Es que yo no soy una piña cualquiera… soy de savia azul, mi mamá me llamaba “Principiña” -Eso sería antes de la guerra de los 100 piñones, y tú los perdiste todos. -Los perdí con dignidad y eso me hizo heredera del honor que me acompañará siempre. -Quítate de enmedio del camino que como venga el hijo del pastor, de una patada te pone el honor y la dignidad en la otra parte de la pinada. A partir de una idea de Dorotea, ella pone la foto y nosotros el resto