Insumisos


Es el momento de la insumisión, de rechazar este sistema de hacer política y la forma de participar en ella.
Es el momento de mantener y exigir requisitos y derechos incuestionables por razones de conciencia.
Es el momento de negarse a jugar un juego que huele a podrido y en el que cada día que pasa nos sentimos irreversiblemente engullidos.
Es el momento de pronunciarse, con acción o por omisión, y no dejar las cosas para mañana, porque mañana será tarde.



Resumen de la conversación sostenida por Josep Maria Vileu con Lluís Llach en Porrera el veinticinco de octubre del 2001.

"Insubmís es una historia de descubrimiento y de reconocimiento. Uno de los grandes privilegios de mi trabajo es que la gente viene a pedirte cosas, viene a pedirte compromisos y, por lo tanto, te hacen planteamientos sobre los que a veces ni has oído hablar. Uno de mis grandes privilegios, pues, es que, continuamente a lo largo mi carrera, de algún modo, me han puesto sobre la mesa temas que socialmente estaban en primer plano.

Desde el momento en que los conocí, me dije: «Yo quiero estar al lado de esta gente». Quería beber, atragantarme con todo lo que estaba sucediendo; yo que soy una persona que ha vivido bajo una dictadura, quería saber cómo percibía esta gente, que prácticamente no ha vivido el franquismo, el militarismo; la renovación de planteamientos que hacían; el lado utópico que había de cosas imposibles.

Esto lo hice no sólo por un sentido de coherencia militante, sino por egoísmo; porque al final resulta que cuando me lo paso bien es cuando puedo cantar para los que entienden como yo la historia, la vida, la humanidad. No sólo porque les puedo servir, sino porque me informan y aprendo mucho de ellos.

Yo soy una persona que va en un tren de una manera de ver la vida y el mundo, que va corriendo, corriendo, corriendo... pero al mismo tiempo voy y puedo anquilosarme en mi pensamiento y en mi forma de ser. Y, de repente, estos colectivos que te piden cosas hacen que suba gente nueva a tu tren, echan más carbón a la máquina, o viceversa, hacen que yo suba a su tren y que de repente mi tren sea el suyo y todo se confunde.

Quería que la canción tuviese fuerza, potencia, y me salió la vena épica y epopéyica, esa que a algunas personas, quizá con razón, les molesta bastante. Al final de la canción, ganamos; en la canción, ganamos.      Considero que una de les experiencias más bonitas que puede haber es cuando las utopías se hacen realidad. Utopías, muchas de ellas vistas con menosprecio y prepotencia por mucha gente, como algunos intelectuales reaccionarios de derecha que cuando ven que se hacen realidad sufren mucho. Para ellos, siempre son un peligro las utopías. El peligro de las utopías, claro que es real; porque se pueden llevar a la práctica, por eso son tan peligrosas, porque acaban siempre convirtiéndose en realidad." 


                   INSUBMÍS 

Que no hi ha res on miren els teus ulls;
que cap on tu vas, allà on vas, no t’hi espera ningú; que ets captiu de quimeres encara adolescents; que és inútil el gest del teu cor encara massa valent; que no hi haurà mans per a les teves si són buides per bondat...

Jo t’estimo així, insubmís a les armes.
Jo t’estimo així, si el coratge no et deixa sotmetre ningú.

Perquè no saps ni vols aprendre el terror.
Perquè ni sents ni creus en l’odi pera als teus projectes d’amor.
Perquè no ets la ferralla d’un robot assassí.
Perquè imagines la pau més enllà d’un mercat entre botxins.

Sempre hi ha una primavera
que ens espera, somni enllà...
Jo t’estimo així, insubmís a les armes.
Jo t’estimo així, quan el coratge no et deixa sotmetre ningú.

         

                  INSUMISO

Que nada hay donde miran tus ojos;
que hacia donde vas, allá adonde vas nadie te espera; que eres cautivo de quimeras aún adolescentes; que es inútil el gesto de tu corazón aún demasiado valiente; Que no habrá manos para las tuyas, si están vacías por bondad...

Así te amo, insumiso a las armas.
Así te amo, si el coraje no deja que sometas a nadie.

Porque ni sabes ni quieres aprender el terror;
porque no sientes ni crees en el odio para tus proyectos de amor; porque no eres la chatarra de un robot asesino; porque imaginas la paz más allá de un mercado entre verdugos.

Siempre hay una primavera
que nos espera más allá del sueño...

Así te amo, insumiso a las armas.
Así te amo, si el coraje no deja que sometas a nadie.

Letra y música: Lluís Llach

Comentarios

  1. Parece escrito para estos momentos que estamos viviendo. ¡insumisión!

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  2. Aquellas guitarras en el instituto, la estaca de Llac, al vent de Raimon, Labordeta, Jara.... Qué tiempos más insumisos.

    Un abrazo, Alfredo.

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