Este jueves, Relato. Historias de Ascensor
Me paré delante del gran edificio, tenía que entrar, no podía demorar por más tiempo mi indecisión. En aquellas cinco plantas estaba la inspiración que necesitaba para empezar, la fuerza para continuar y la magia para terminar. Delante del ascensor, dudé de nuevo, pero cuando se abrió de par en par, escondiendo las hojas del pulido acero en sus laterales, sentí una atracción inevitable hacia su interior. Estaba solo dentro de la cabina, mi imagen reflejada en cientos de yoes en su paredes acristaladas. El elevador se puso en marcha y ascendió sin más orden que la de mi pensamiento dirigido a su ojo foto-sensor-deductivo. Unos segundos y se detuvo anunciando a través de una cristalina voz: "¡Planta primera!, Temas, Argumentos, Iniciativas, Propuestas..." cerré los ojos y sentí como los cuentos más inauditos se recolocaban en mi estantería mental. Siguió subiendo... el tiempo entre planta y planta era un sueño, una provocación de textos desordenados posicionán