Este jueves, relato. Una foto y su porqué.
Si alguno de mis suspicaces lectores, (que los hay) tuviera la mala idea de llegar a alguna conclusión a la vista de esta foto, habría que advertirle que nada más lejana de la realidad es esta pose de autosuficiencia. Es aparente tanta posmodernidad, la seguridad que se dibuja en este ensayado gesto es alquilada, junto con el resto del atrezzo que completa la escena y que ya debería devolver. No todos sabemos no ser jóvenes, naturales o transgresores. Algunos nos tenemos que vestir de alternativos y rezar para dar el “pego”. Pero la vanidad... hay la vanidad, cuánto nos hipoteca. Sin embargo, empiezo a sospechar que no es tan mala esa “pasta” de la que estamos hechos los abuelos. Y si nos buscáis un poco, aun encontrareis alguna neurona virgen y fértil. Visto así, dejemos la foto como está, que al fin y al cabo es la mía y me la hice yo. Gracias a Mónica por su magnifico regalo, que ha sido el motor para argumentar esta convocatoria. En su Blog y en el de