Este jueves, relato: Un nuevo mundo
Un nuevo mundo es el nuestro, lleno de materias y vacío de valores. Pero supongo, que diferente a otros nuevos que están por llegar, en los que se multiplicarán las materias y dividirán los valores. En los inventarios que postmorten realizaban los notarios en el siglo XVI, apenas se relacionaban una docena de objetos personales por cada difunto. Hoy, en este nuevo mundo (especialmente el occidental) los ciudadanos almacenamos un promedio de 50 muebles y un total aproximado de 300 objetos personales, cifra que varía al alza, tal y como se generan más y más necesidades. Este nuevo mundo es un inmenso contenedor de materia transformada en desechos, y de valores en riesgo de extinción. Un nuevo mundo que envejece mal y pronto, y que lo único que ha aprendido a hacer es a vomitar miles de millones de objetos, para ser vendidos, usados, revendidos, olvidados y tirados. Todo un caos organizado. Pero el futuro (de nosotros depende) no es tan dramático, podría ser hasta excitante y