Esta plaza ubicada en el barrio de Gracia de Barcelona es un lugar nostálgico en el que a uno le gustaría que todas sus ilusiones se cumplieran. Tal vez, para compensar los desdichados avatares de sus dos entrañables protagonistas, el Quimet y la Colometa.
Uffffff!...esas despedidas sí que llegan como un latigazo!
ResponderEliminarMuy ingenioso tu aporte.
Un abrazo
A buen entendedor con pocas palabras basta. Eres un genio. Saltibrincos
ResponderEliminarLa peor despedida. Me uno a mis dos compañeras para decirte que eres un genio.
ResponderEliminarUn beso
Isa
http://cabalgandopormimundo.blogspot.fr/
Una situación que cada vea es más corriente.
ResponderEliminarMmm... Una despedida fuerte!
ResponderEliminarMira como has expresado una palabra tan amplia con algo tan conciso.
Gracias por unirte.
Un abrazo.
Estupendo aporte. Esta despedida es de las que más duele.
ResponderEliminarBeso
Una despedida dura y definitiva.
ResponderEliminarbesos
Contundente e implacable.
ResponderEliminarEste despido no es un adiós al uso, es mucho más contundente y claro. Un idea muy original, para despedir a a la suegra a algún pesasado. Saludos!
ResponderEliminarJajaja, me encanta, siempre eres super original y divertido.
ResponderEliminarMuchos besos.