Este jueves, relato: Párrafos incluidos.
"Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo" Pensó, que este era otro tipo de hielo, el que paraliza los sentidos, detiene el tiempo y eterniza las dudas -¿Por qué yo, y por qué ahora? Se preguntaba el coronel. Tantos riesgos pasados, tantas batallas peleadas, tantos flirteos con la muerte salvados. Hubiera preferido mil veces morir de manos del enemigo conocido, que de la mezquina mano de este amigo desconocido- Pero ya era tarde. Sus recuerdos y su mirada se perdieron entre los pedregales que delimitaban el paredón y la borrosa fila que formaban sus ejecutores. Sintió en su cuerpo el frío de la piedra y en su corazón la ausencia de su amada. Aquel hielo de entonces le heló el alma de ahora, y sin pretenderlo, su espíritu se despidió con un hilo de voz dirigido a aquella gélida pared de mampostería: