Este jueves, relato. Ciudad Utópica
La Tierra gira y gira, y en
ese girar, se mezclan materias con pasiones, efluvios con deseos. Aparecen entonces
ciudades nuevas, ciudades utópicas que nos enamoran eternamente.
Mi ciudad, después de la
integración tiene forma sinuosa y senderos misteriosos que explorar.
Su entrada es un corazón que
a flor de piel hipnotiza, una puerta intangible que invita al milagro.
La primera avenida empieza
con dos arcos negros de charol deslumbrantes, sus tejados cubiertos
de tejas color de la paja me envuelven y confunden. Dos fuentes de sonrosado
caño e inagotable morbidez dan paso a la gran Plaza de la Vida, intensa, húmeda
por el rocío de la pasión, arteria vital de pócimas y demás encantamientos.
La Gran Vía, nace entre un
jardín de rosas ensortijadas, parada obligatoria para el disfrute y la
extenuación. Al final con el color de la carne y el olor a tierra mojada, se
estiran dos bulevares de suaves curvas y cremoso tacto.
Siempre… siempre, regreso
por el mismo camino.
Esta es mi ciudad, este es su
cuerpo.
Me agrada tu ciudad y más aún la manera de narrárnosla. Bs.
ResponderEliminarSu descripción me la ha Hecho interesante de visitar ¿me invitas?
ResponderEliminarsi lees el comentario que le he hecho a valaf,leerás mi comentario para ti.
ResponderEliminarmedio beso.
Siempre ahorrando, eh, maragato. Con lo que me gustan tus largas reflexiones.
EliminarSutil, exquisito, sensitivo. Una ciudad sensual y tan atrapante como la belleza y la felicidad de saber que en algún lugar del mundo, está el refugio de cada quien.
ResponderEliminarNada más utópico que los sueños, nada más vital que soñar. Y si sueñas, podes escribir textos tan bellos, que hacen de un lugar un paraíso.
(bueno me extendí un poquito más que el maragato, espero que no demasiado...)
Besos
Dan ganas de hacer las maletas, o mejor, sin equipaje y ponerse a las puertas de esa ciudad soñada y pedir asilo.
ResponderEliminarUn beso
Esta ciudad utópica, pero real es la meta de todo ser humano y una quimera hecha realidad. Es un conjunto de calles,avenidas y plazas, que van siempre en la misma dirección: al Taj Majal. Al templo del amor.
ResponderEliminarUna metáfora, digna de un gran poeta.
Saludos.
Regresamos de la utopía con los colores y avenidas, fuentes, calles, soñadas pero verídicas en los recovecos de la memoria, a la avenida principal que conduce al itinerario donde emana toda delicia.
ResponderEliminarPaseé tu viaje con sumo placer utópico pero posible, besito.
Tenes una imaginación muy precisa. Muy interesante la descripción de tu ciudad utopica.
ResponderEliminarSe me abre una ciudad para los sentidos, oler la pasión cual flor ardiente, que espera en delicada piel para ser tocada, acariciada, ansiada, besada, sin dudas tu ciudad tiene cuerpo y alma.
ResponderEliminarUn abrazo Maestro :)
Vaya, cómo están los hombres esta convocatoria! Acabo de leer el relato de Valaf que es muy parecido al tuyo.Se ve que te encanta la ciudad donde vives.
ResponderEliminarCómo me gustaría encontrar para mí una ciudad como la tuya!
Un beso
Con que delicadeza y bellleza has descrito tu ciudad. Me ha encantado el paseo. Gracias.
ResponderEliminarUN abrazo.
Yo estoy contigo: no hay ciudad mejor, con mejor aroma y mejor tacto. No hay orografías como esta, ni ciudad con un clima más variado, desde lo tórrido hasta lo húmedo, pasando por zonas templadas.
ResponderEliminarExcelente!!
Un abrazo
Sútil y bella descripción la que haces de esta tu especial ciudad y tu paseo por ella. Un beso.
ResponderEliminarBella y para ti, acogedora ciudad que seguro tiene nombre de mujer.
ResponderEliminarUn abrazo.
Bella ciudad sinuosa con colores y olores. Un abrazo.
ResponderEliminarAlfredo, no hay nada tan distinto como el mismo camino que siempre elegimos. El resto también es Utopía.
ResponderEliminarA mí en la realidad me pasa lo mismo. Y cuando cambio el trayecto habitual. Viene la duda, se me acerca y con cara de buena gente, pregunta con un gesto.
Por qué..
Señora, no podría decírselo. LLevo prisa por coger la acera de siempre.
Un abrazo.
Qué bonito.
ResponderEliminarPues vive la utopía, vívela con tus cinco sentidos.
Beso y cafelito.
Esas fuentes de caños sonrosados e inagotables, y la gran plaza de la vida, ahí quiero estar yo. Esa ciudad debe existir, porque como la describes, alguien te debiera escuchar y crearla.
ResponderEliminarUn abrazo
El mismo camino, nunca igual; ese paisaje urbanístico tan íntimo, lleno de sorpresas en cada uno de sus recovecos. Has dibujado un mapa excitante. Me ha gustado mucho.
ResponderEliminarUn abrazo.
Veo que como el amigo Valaf, has descrito con pasión lo que resulta ser tu territorio amado.
ResponderEliminar=)
Más que una ciudad, lo suyo es un Templo!
ResponderEliminarAfortunada musa que ha inspirado tus palabras. Una descripción sensual y bellas metáforas, arcos, fuentes, rosas, bulevares...quiero convertirme en la ciudad utópica de un poeta.
ResponderEliminarUn beso.
Un lugar perfecto para vivir el que describes, y si siempre regresas por las mismas sendas, esas también serán tu casa. Besote
ResponderEliminarEsta es la mejor muestra de que no hay dos utopías iguales, ni dos cuerpos iguales, ni dos amores iguales.
ResponderEliminarUn placer leerte.
La mejor ciudad en donde perderse, lo has expresado de una forma sumamente sensual y poética.
ResponderEliminarUn abrazo.