Esta plaza ubicada en el barrio de Gracia de Barcelona es un lugar nostálgico en el que a uno le gustaría que todas sus ilusiones se cumplieran. Tal vez, para compensar los desdichados avatares de sus dos entrañables protagonistas, el Quimet y la Colometa.
qué colorido!...eso sí, uno no puede dejar de inquietarse por la pobreza. Estas instantáneas nos abren valiosas ventanas a esa realidad que has visto en primera persona. gracias por ello. un abrazo
!Madre mia Alfredo! !madre mia!, no te comento más.
ResponderEliminarUn gran abrazo.
Increibles escenas. No sé si mis ojos podrían captar tanto... digerirlo...
ResponderEliminarPreciosas fotoss de esta experiencia!
Un abrazo
Con estas imagenes regresas colmado de gentes, de auténtica riqueza.
ResponderEliminarFelicitaciones, besito.
qué colorido!...eso sí, uno no puede dejar de inquietarse por la pobreza.
ResponderEliminarEstas instantáneas nos abren valiosas ventanas a esa realidad que has visto en primera persona.
gracias por ello.
un abrazo