Eduardo Chillida
Esta semana se cumplen 89 años del nacimiento de Eduardo Chillida. Junto al anfiteatro, sobre el Mar, discurre la calle que conduce al final del Paseo y que va descubriendo al paseante, primero, la escultura de la derecha, a continuación la del horizonte y finalmente el conjunto de los tres peines. Aprendo de ellos a adivinar el alma de las cosas. Los acaricio y fijo la mirada en el paisaje donostiarra a través de sus densos y descriptivos vacíos. Jorge Guillén a Eduardo Chillida: “Luego trabaja, luego golpea, luego… Hay que domar el caos. Hay que colonizar el vacio y poblarlo De figuras dominantes y sagradas. Lo hace a su modo, como antes hicieron otros, golpeando, sudando, pensando, hace… Se nota en su taller de ferrón y en un olor, y en un calor”