Este jueves, relato. Secretas Fantasías
Benjamín tiene 90 años. Su vida, como agua que busca el mar, se escapa entre sus dedos. No duele la indigencia, está solo. No le preocupa la muerte, a esa edad no es una desgracia de consecuencias irreparables. Nunca hasta ahora había necesitado fantasías. Sus sueños, antes de serlos, ya eran realidad. Tuvo cuanto quiso. Cariño, el de los que le conocían y sabían de sus bondades. Respeto, el de los que le frecuentaban y siempre encontraban apoyo. Admiración, la de los que necesitaron conocimientos y de él los obtuvieron. Amor, el de todos a los que amó. Ahora, en su epílogo vital, se descubre en mitad de la noche soñando despierto. Es una experiencia nueva, desear algo en secreto. Por un momento con la mirada perdida sustituye la vista del inhóspito callejón por una borrosa ilusión... Y sueña con una pequeña habitación, cuatro paredes pintadas de recuerdos y una ventana por la que mirar, seguro y en paz, al mar... será su única y última fantasía. El completo de l