Este jueves, relato... encadenado
Se despertó húmeda, los cuervos de nuevo le acompañaron en una impenitente vela sin que nada pudiera hacer. Miró detenidamente el medallón y se preguntó por qué todavía colgaba de su cuello. Tal vez algún privilegio que desconocía y del que seguramente no había sacado suficiente partido. Por primera vez en mucho tiempo buscó en su alma. Alborotó en ella con descaro, la sacudió de recuerdos, y se detuvo en el negro acharolado del azabache. Los folios de su vida cabían en aquel oscuro y brillante centímetro cuadrado. Leyó en ellos con detenimiento, señalando con su índice unas imaginarias líneas, hasta que un cuervo la sobresaltó: -¡Tú... tienes visita! Este relato lo continua Casss en el Blog: The Daily Planet's Bloggers Y la historia completa la podéis seguir en el Blog de Encarni.